BRIC-BARCA DEL SIGLO XVIII
BRIC-BARCA DEL SIGLO XVIII
Este tipo de barco también fue conocido con el nombre de corbeta y bergantín-barca, en los siglos XVII y XVIII. Era una navio de entre veinte y treinta metros de eslora (longitud) y de buenas condiciones marineras, que fue muy utilizado en aquella época, tanto por la Marina de guerra como por la mercante.
Su construcción se puede efectuar por los dos procedimientos ya conocidos: con casco de una sola pieza para tamaños hasta de veinte centímetros y por el sistema de varias planchas para modelos mayores. Aconsejamos su construcción a treinta centímetros de eslora, por lo cual habrá de ampliarse el modelo convenientemente.
En la figura 151 vemos su airosa silueta en lateral, así como también el corte en sección, a la altura de la cuaderna maestra (O). Como en el caso anterior, las curvas de sección a la izquierda del eje central corresponden a la porción desde el centro del casco hacia la popa, y las de la derecha, a la porción desde dicho centro a la proa.
También en este caso, para no complicar su construcción, hemos decidido hacer el casco de tres planchas solamente, denominadas con las letras A, B y C.
Podemos ver perfectamente en la figura 152
(A) el perfil del casco en alzado, en el que se aprecian las tres planchas, así como los lugares en que se dan los cortes en sección del casco
También se indica la línea de arrufo y la toldilla, así como la posición de las amuras, bordas y aletas. Como podemos ver, al carecer este modelo de barco de castillo de proa, las amuras son en realidad una prolongación de las bordas.
(B) representa en la misma figura 152 la plancha (A), cuya parte superior es la cubierta, y en la que están dibujados todos los elementos montados sobre la misma.
Comenzando por la popa, vemos la rueda del timón, cuyo detalle se da en (C), y que es un pequeño tarugo de madera montado sobre un rectángulo de contrachapado fino, y provisto de la rueda, que podemos recortar con la sierra de calar, también en contrachapado.
En (E) se detalla la forma de sujetar el timón al codaste, aunque aconsejamos dejarlo fijo, con su parte superior introducida en una ranura practicada en el rebaje de la popa, por los motivos que ya explicamos en el modelo de la carabela.
A continuación está la cabina de popa (gemela de la proa), cuyo detalle se da en (D). Se hará con un taco rectangular de madera, a cuya parte superior se dará una forma curvada, montando sobre ella el techo, que es un rectángulo de
cartón duro, algo mayor que el taco de madera. Una vez pintada la cabina, se le figurarán la puerta y los ojos de buey, también pintados.
A ambos lados de la cabina van las escaleras, que permiten el acceso a la toldilla, y sobre su techo, dos de los cuatro botes de salvamento de que va provisto el barco, cuyo detalle damos en la figura 153 (C). Aconsejamos tallar los botes en una sola pieza, imitando con pintura el fondo de los mismos y los bancos, aunque, si se prefiere así, se pueden construir por el procedimiento explicado en el caso de la carabela.
Los cabuleros son unas armaduras de madera que rodean los palos de trinquete y mayor, donde van a morir los cabos de maniobra. En (D), figura 153, vemos dos detalles de su figura. Se pueden hacer con pequeños listones de madera o cartón para los modelos pequeños, perforando los listones superiores para introducir las cabillas.
La escotilla es un rectángulo de madera fina, en la cual se pueden figurar, pintándolos, los escalones que llevan al interior del casco.
El molinete del ancla se hará asimismo con pequeños listones, tallando la rueda de deslizamiento de las cadenas. Estas se pueden hacer de un gran realismo con dos trocitos de cadena de medalla.
El cabrestante se hará con un pequeño taco de madera, dándole forma cilindrica y de mayor diámetro en su base que en su parte superior.
Las planchas B y C del casco se representan también en la figura 153, en sus dos vistas de planta y corte de sección, por lo cual no habrá más que llevarlas a la madera, debidamente ampliadas y cortadas por el procedimiento indicado en las instrucciones generales, para tener completo el casco, una vez encoladas entre sí las tres piezas.
Los palos los construiremos por el método ya conocido de tres piezas, y las vergas, cofas y crucetas siguiendo también las instrucciones anteriores.
Respecto a las vergas, hemos de advertir que su longitud no es la que aparece en el modelo, ya que aquí están representadas en vista de tres cuartos, para mejor poder apreciar la colocación de las jarcias, por lo cual habremos de hacerlas una cuarta parte más largas.
En cuanto a las velas, aunque damos el modelo desprovisto de ellas, se pueden hacer de alguna tela no muy fuerte, aunque sí algo rígida, sujetándolas a las vergas por su parte superior, y a las vergas de debajo por los picos de la parte inferior mediante unas vueltas de hilo. Para los modelos pequeños se pueden hacer de papel.
Damos en el plano los cabos principales estays, obenques, brandales, etc., para que se aprecie su colocación. Los pequeños redondeles indican los montones y las vigotas.
Podemos pintar el modelo de la siguiente manera:
Los palos y superficies de la cubierta, asi como los cabuleros, en color crema, imitando el color natural de la madera.
Las paredes de las cabinas, la escotilla, el molinete y el cabrestante, en gris muy claro. La rueda del timón, las escalerillas y el bauprés, en marrón oscuro.
En cuanto al casco, pintaremos la obra viva, desde la quilla hasta un poco más de la línea-de flotación, con un esmalte verde medio, así como las cintas y el resto del casco en blanco.
Otra combinación para el casco sería en rojo bermellón para los bajos y cintas, y en negro para el resto del casco, pintando todos tos demás elementos como en el caso anterior.